El derecho de sucesiones regula la relación entre los herederos tras el fallecimiento de una persona llamada difunto para la transmisión de sus bienes. Con este fallecimiento se abre una sucesión y primero hay que establecer quién, entre sus parientes, puede heredar sus bienes inmuebles y muebles (bienes muebles, sumas de dinero, recuerdos familiares, etc.). El orden de los herederos está definido por el Código Civil y un heredero puede aceptar o rechazar una herencia.
Los litigios sobre herencias se refieren a las disputas que surgen entre los herederos durante una herencia. Estos litigios pueden ser de diversa índole (por ejemplo, fraude sucesorio, apropiación indebida de una herencia, donaciones indebidas, etc.) y pueden ser el origen de numerosos conflictos entre herederos.